Su inicio no pudo ser mejor, debutó en el año 1974 con el “Número Uno” en la historia de la televisión de Venezuela, Renny Ottolina, en su programa estelar “Renny Presenta”, pero es en 1979, cuando su voz acompaña un comercial de televisión que a los pocos días de estar en el aire, causó una situación sin precedentes en Venezuela, tanto el público como el periodismo, reclamaban conocer la identidad de la cantante. De inmediato, Delia Dorta fue presentada en Sábado Sensacional, el show de televisión de mayor audiencia en el país, convirtiéndose en el rostro más popular del momento.
Ese mismo año, “Delia”, como comienzan a llamarla todos, participa en el Festival OTI Nacional donde al ganar el primer premio, obtiene el derecho de representar a Venezuela en el Festival OTI Internacional, en el que enfrentándose a reconocidos cantantes, logra el segundo lugar.
Como consecuencia de sus logros, le ofrecen un contrato discográfico para grabar en España, donde la producción es realizada por los talentosos Herrero y Armenteros. Se inicia de esta manera, la carrera profesional de una artista que, disco tras disco y show tras show, se ha convertido en una de las voces más respetadas de Venezuela. Ha compartido escenarios con figuras de la talla de Julio Iglesias, John Travolta y Armando Manzanero, entre otros.
Son muchos años de constante superación los que acompañan la trayectoria musical de Delia Dorta, artista que ha sabido mantenerse en la elite de los artistas nacionales, gracias a la calidad que siempre identifica a sus trabajos. Actualmente Delia dá clases de canto particulares, haciendo del cantar un Hobby y una forma de vida.
Talento, clase y profesionalismo, seguirán siendo el aporte de Delia Dorta al mundo artístico, y el público, su único beneficiario.
Antonio Dorta (Villo)
El arte debe esgrimirse como un arma para el progreso porque aunque invisible, suele surtir grandes efectos. . . Así de proféticas son las palabras de Antonio Evídeo Dorta Hernández, uno de los pilares imprescindibles en la identidad cultural taguasquense. Este maestro de maestro nació el 13 de junio de 1934, es entonces en ese instante que Terpsícore, musa de la música, lo dota con su arte. Mis tíos tocaban en un conjunto y colgaban el tres detrás de la puerta, yo tenía 8 años y se los robaba para hacer sonar sus cuerdas, después siguieron otros instrumentos como filarmónica y la marímbula.
Esta afición autodidacta se extendió hasta sus 20 años de edad cuando matricula en el Instituto Privado de Música Horta en la ciudad de Santa Clara. Allí cursa dos años de trompeta , dos de corno- trompa- y cuatro de teoría y solfeo de la música. En ese tiempo de formación académica explotó simultáneamente sus potencialidades instrumentistas en la Banda Militar de la ciudad, el Conjunto Cuba, las orquestas Santibana y Hollywood Swing.
En 1960 regresa a su Taguasco natal donde inicia, a mediana escala, su trabajo de formación musical con las nuevas generaciones, además, ejerce como tabaquero y se integra al conjunto Hermanos Carmona devenida en orquesta en 1962. En este período, donde el jazz band toma gran fuerza en Cuba, Villo, incursionaba en diferentes géneros como la guaracha, el bolero, el son, el danzón, el paso doble y el cha cha chá.
En 1970 la orquesta se reduce de 14 a 6 músicos y se funda la agrupación que marcó la memoria popular de Taguasco: el combo Los Astros, bajo la dirección de Celestino Carmona. En esta etapa irrumpe en la llamada música ligera bailable bajo la influencia de la Década Prodigiosa alternando su carrera musical con la Banda de Concierto de Sancti Spíritus, donde tocaba la trompa, allí permaneció durante 24 años realizando presentaciones, fundamentalmente, en la retreta del parque y en actos oficiales y militares.
La creación musical y el trabajo con niños encuentran un momento prolífero en 1970, las bandas rítmicas fueron una experiencia revitalizadas por este hombre que en 1976, y por idea de la maestra Élida Alonso, formó a un grupo de estudiantes primarios con instrumentos entregados por Armando Acosta Cordero. Le hice la promesa a Armando de convertir , en cinco años, la banda rítmica de Taguasco en una de las mejores del país, y en sólo tres ya había cumplido mi palabra. Ganamos el trofeo del XI Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes efectuado en La Habana en 1978 y fuimos, además en 1979, a la inauguración del Palacio Nacional de Pioneros Ernesto Guevara ante la presencia de Fidel.
El 2 de febrero de 1977 inicia su labor como metodólogo de aficionados en la Casa de Cultura de Taguasco, fortalecía así, mucho más, su trabajo de formación de nuevos talentos.
En 1983, y como resultado del trabajo sistemático con niños y jóvenes, lograr agrupar a 23 músicos de atril que conformaron la primera y única banda de concierto de Taguasco, que desapareció desafortunadamente para la cultura de este municipio por conceptos tecnicistas de una comisión evaluadora. De esta oleada de jóvenes instrumentistas formados por este maestro, sobresalen algunos nombres de músicos profesionales que han recorrido diferentes escenarios de Cuba y el mundo. Ejemplos de ello son Arnelio Carbonell y Roberto Oliva, percusionistas, Pipo Castro, saxofonista, Toni Moranti, trompetista, Mario Alexis Villanueva, bajista y Antonio Dorta ( hijo), clarinetista. Me siento realizado porque nunca me sentí capaz de poder hacer tanto , pero ver a todos estos jóvenes con tanta inteligencia , capacidad y poder de comprensión es gratificante y mi hijo…bueno, saberlo música de la Orquesta Sinfónica Nacional de Cuba es un orgullo sano, es un orgullo que casi no cabe en mi.
En 1990 decide retirarse de la música profesional activa y en 1994 se jubila del sector de la cultura, este paso no significó en lo mas mínimo un distanciamiento de la música o la creación, ya que continúa activo dentro del sistema cultural brindando asesoramiento, experiencias, vivencias, y lo más importante, sigue siendo el patrón a igualar o alcanzar por los nuevos que llegan al mundo del arte. Durante su amplia carrera artística, este hombre meditador, analítico y pausado puso su vasta experiencia, vivencias, y lo más importante, sigue siendo el patrón a igualar o alcanzar por los nuevos que llegan al mundo del arte. Durante su amplia carrera artística, este hombre meditador, analítico y pausado puso su vasta experiencia y conocimiento en función de ser jurado en varios conclaves artísticos, como fueron los festivales de aficionados que se desarrollaron durante toda la década de 1970 y principios de los 80, es fundador de los equipos evaluadores de las Ferias Nacionales de Arte Popular y también se ha destacado por ser un ferviente defensor de las raíces más auténticas de la cultura nacional, la cocina tradicional campesina, los medios de producción y el amor en términos genéricos por el campesinado cubano, todo esto le ha caracterizado y merecido el respeto de todos. Para mí el arte es una de las razones de vivir, porque sin el arte la vida sería vana.
La trayectoria artística de Antonio Dorta ha sido reconocida en varias ocasiones, por constituir un ente vivo dentro de su comunidad, dad su sistematicidad, constancia, entrega, dedicación y por hacer germinar la sensibilidad musical en más de una generación de taguasquenses, todo esto le hace ostentar las medallas 28 de septiembre, que entregan los CDR, 25 años en el movimiento de artistas aficionados y la Raúl Gómez García que otorgan el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura, posee, además, el Premio Municipal de la Cultura Comunitaria y la Condición de Símbolo de la Cultura e el Municipio de Taguasco.
En la vida de este maestro, la familia ha sido un eslabón primordial para poder desarrollar su pasión por la música, en ella ha cultivado la sensibilidad por esta manifestación, logrando excelentes resultados y a la vez le ha servido como refugio y hogar donde encuentra la paz espiritual que necesita como creador para entregarse por entero en esta no menos difícil labor que es hacer y combinar sonidos repletos de armonía.
A Villo, como casi todos le conocen, es fácil encontrarlo torciendo un buen puro en cualquier horario del día o sencillamente conversando como buen cubano de los más variados temas, eso sí, siempre interesantes y al finalizar, se lleva su interlocutor una grata experiencia y un sabio consejo. Por su humildad, modestia profunda psicología humana los más jóvenes siempre encuentran en este artista una fuente de consultas y motivaciones.
Este hombre de excelentes cualidades humanas y artísticas degusta, deliciosamente el presente, con la seguridad de un buen catador que ve multiplicarse por días, la fuerza y el amor que sienten los nuevos profesionales del arte. Se siente realizado pero nunca satisfecho, espero, nuevamente, poder escuchar algún día el sonido de una banda de conciertos 100% con músicos Taguasquenses , ese sería mi mayor sueño a realizar.
Muchas gracias Villo por existir, por su entrega, enseñanzas, moralejas y sobre todas las cosas por educar. Los mejores votos para que este deseo suyo no sea una quimera y que la vida permita a todos, los que habitan el cuatricentenario Taguasco , poder disfrutar de los armoniosos arpegios, el placer que se siente cuando los sueños se convierten en sonidos.
Haría, Valle de las diez mil palmeras, Lanzarote, Islas Canarias
© Nació en Haría el 2 de Julio de 1925.
© Ordenado sacerdote en la S. I. Catedral de Las Palmas de Gran Canaria el 29 de Junio de 1950.
© Su primera Misa el 2 de Julio de 1950 en Haría, Lanzarote.
© Canónigo de la S. I. Catedral de Las Palmas.
© Arcediano de Lanzarote.
© Falleció en Las Palmas de Gran Canaria, el 13 de Septiembre de 1994, y su cuerpo descansa en el cementerio de su pueblo natal; Haría, Lanzarote.
En 1992, con motivo de su jubilación, la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria publicó un libro homenaje a D. Enrique Dorta, en el prólogo del mismo nuestra compañera Emigdia Repetto Jiménez, le dedicó unas sentidas palabras, que transcribimos a continuación.
Portada del libro homenaje
Han transcurrido ya veinte años desde que Monseñor Infantes Florido Obispo- de Canarias- trajese a Las Palmas, desde su Haría natal, al sacerdote Enrique Dorta Afonso. Al nombrarle canónigo de la S. I. Catedral, le encomendaba también la docencia de la asignatura “Doctrina Católica y su Pedagogía” en la entonces Escuela Normal de Maestros. Hoy se jubila y sus compañeros quieren dedicarle como homenaje este libro cuyos diversos capítulos están formados por los trabajos que sus amigos han escrito para él.
A mí, como Directora del Departamento de Didácticas Especiales al que pertenece, me ha correspondido recopilarlos y lograr que estas páginas lleguen a manos del Dr. Enrique Dorta, segura de que otro tipo de agasajo no hubiera sido de su agrado.
Sin que pretenda hacer una biografía –no sabría hacerlo- si me gustaría resaltar cómo desempeña nuestro compañero la tarea de “enseñar”, a la que no en vano el Vaticano II, en la expresión tradicional de la Teología, se refiere como una de las misiones sacerdotales (“santificar, enseñar y regir”...). Es un hecho real que abandona ahora la docencia en nuestras aulas por el simple hecho de haber vivido ya más que nosotros, pero pienso que no dejará de ejercerla desde el púlpito, y no sólo porque... “los presbíteros tienen por deber primero el anunciar a todos el Evangelio de Dios, de forma que, cumpliendo el mandato del Señor... formen y acrecienten el pueblo de Dios”, como afirma el “Presbyterorum Ordinis”, sino porque todos sabemos de su dedicación, preparación y elocuencia. Basta recordar cómo cuando la Escuela Normal pasa a ser Escuela Universitaria marcha a Navarra para, en su Universidad, hacer la Licenciatura en Teología y más tarde obtener el grado de Doctor con la máxima calificación. Por otro lado, cuatro veces predicó el sermón de “las Siete Palabras” en la Catedral en la mañana del Viernes Santo; tres, el panegírico de la fiesta de San Pedro Mártir; las novenas a la Virgen de la Soledad o del Pino; los numerosos “ejercicios” a sacerdotes, religiosas, seminaristas o seglares tanto en las islas como en la Península. Ha sido su actividad tan fecunda que son pocas las iglesias de Canarias donde él no haya predicado.
Su vida docente comenzaría allá por los años 50, con aquellas catequesis en San Cristóbal o en Monte Coello, y las clases de Religión en la Escuela de Comercio. Después en Haría... y al darse cuenta de las necesidades culturales de su pueblo empieza a instruirlos, primero en su casa, luego en algún local prestado, hasta que funda “la academia”, donde los alumnos aprenden lengua, matemáticas, física o química... Esta semilla germinó y dio abundante fruto pues más tarde se transformó en “Colegio libre adoptado” y hoy constituye el Instituto de Bachillerato de Haría. Dieciocho años de labor continuada, primero como Coadjutor y luego como Párroco dejaron huella en su “valle de la 10.000 palmeras” y así supo reconocerlo el pueblo cuando el 23 de abril de 1983 el Ayuntamiento de la noble villa de Haría”... en reconocimiento a su constante labor pedagógica, social y cultural, le confiere el título de “HIJO PREDILECTO”, como consta en el documento de su nombramiento.
Su labor en la Escuela del Profesorado la conocemos todos. No sólo ha impartido su asignatura con dedicación y entusiasmo, sino que ha intentado “formar profesores”. No dudamos de que ha sabido convencer a sus alumnos acerca de la importancia de lo bello en la búsqueda de la verdad. Es el sentido de aquella frase “simples sigillum veri”, “lo sencillo es la clave de la verdad”, que como advertencia para aquellos que quieren descubrir algo nuevo figura en el Auditorio de Física de la Universidad de Gotinga. De igual forma, habrá intentado que aprendan a admirar la naturaleza y tal como afirma Heisenberg “a sentir en el alma cuando se descubren ideas exactas un proceso de extraordinaria intensidad”. Siempre he admirado su interés por el conocimiento de los fenómenos de la naturaleza y la felicidad que es capaz de experimentar y transmitir al entenderlos y pienso que sea debido a aquello que opinaba Kepler a este respecto... “a ideas que se hallan en el espíritu de Dios y que son innatas al alma por ser ésta semejanza de Dios”.
Finalmente, su carácter de sacerdote le ha hecho ser no sólo un profesor, sino también un amigo y un consejero de los alumnos que así lo han querido. Y si bien muchos han acudido a él para buscar solución a un problema o para encontrar alivio a sus penas, también otros han querido hacerle partícipe de los momentos felices, de bodas, de bautizos; de todo ello son testigos mudos los muros de la Catedral o los de San Telmo.
Por último, quede para el sacerdote y compañero, para el amigo, ya para siempre, un recuerdo y un afecto sincero y hondo, y conste nuestro agradecimiento a Jesús Arencibia por permitirnos reproducir el dibujo de la portada.
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| LEGISLATURA CONSTITUYENTE | ||
Senador electo por Tenerife (SANTA CRUZ DE TENERIFE) con fecha 15 de junio de 1977.
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BAJA COMO SENADOR POR CESE CON FECHA 2 DE ENERO DE 1979.
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Chucho Dorta, amigo de alcurnia infantil, estudiábamos juntos en los salesianos, y jugábamos impresionantes partidos de fútbol en la plaza de Franchi Alfaro, me ha embriagado en la ACTUALIDAD con su tendencia en adarve del origen canario concretamente de su demografía guanche, en amparo a sus raíces. Sin embargo me ha aturdido con su ultimo libro "Sol, Fuego, Cabras y Mar en Las Noches de San Juan", que me dedicó desinteresadamente una mañana alumbradora de Sol en el casco histórico de la Villa de La Orotava, en pleno quehacer como alfombrista, a aroma de flor ingenua.
or que por favor le llenara la garrafita porque tenía miedo al mar.
pasaba por aquí una mujer vendiendo tortas de acemite, que se hacen con millo, e Inocencia le ponía la miel por encima y eran muy sabrosas. Nosotros nacimos en unos pajales en la finca de los Osuna, que la tenía arrendada Don Enrique Ascanio. Recuerdo de esa época que tu bisabuelo, padre Miguel, escondía los billetes en los muros de piedra de la finca; ellos eran muy amigos de nuestra familia, pues vivíamos a dos pasos, casi junto. Ahí debajo, en el campo, habían muchos frutales y recuerdo que el día de San Juan a los niños quebrados los llevaban al mimbrero, que estaba más alladito de donde nosotros vivíamos, por encima de donde estuvo más tarde la medianera Carmen "La Monja", que era una mujer muy Santa. A los niños los solían llevar a las 6 de la madrugada al mimbrero. Hacían un corte en una rama y luego cosían las dos partes separadas de la rama y, según iba cicatrizando y pegando el corte, el niño se iba curando. En el mismo mimbrero, ese día echaban rezados al niño y después, sentados junto al mimbrero hacían un brindis con vino dulce, refrescos, galletas, bizcochos, mimos y otros dulces de las conocidas y famosas dulcerías de la Villa. Esto que te cuento, mi niño, yo creo que era en tiempos de la República, y recuerdo que ondeaba la bandera republicana en el colegio de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, conocido hoy como Colegio de los Salesianos. Chucho desconsolado por descubrir el antiguo mimbrero, se dio una vuelta por Carmenati, allí se paseó por todas partes y mirando por los estanques y por las pocas tajeas que quedan de la hecatombe del cemento, no vio ni un mimbrero, hasta los nispereros que quedaban se secaron en el abandono. Entonces buscó en el viejo arcón de los recuerdos y se vio trepado haciendo malabarismo sobre el canal, a dos metros y medio de las huertas de millo, jugando con los barquitos de madera que se llevaba la luminosa corriente. Vio la cometa en forma de estrella volando sobre la iglesia de La Concepción y el caserío histórico de La Orotava.
el canal de los mimbreros: Y le mandaron por consejo de los benditos curas a un colegio interno en Teror, Gran Canaria. Total, pa nada, porque volví igual o peor y me metía a bañarme en el canal. Un día después de pasear por la Orotava artística, le dio por entrar en casa de su prima Juanita Bello, en la calle del Calvario, y aunque no va a menudo, siempre que va, pasa unos ratos tan buenos como en la niñez, porque las primas le adoran. Allí, gozando con el patio lleno de macetas con plantas y flores, entre muebles y cuadros viejos llenos de vivencias familiares, con su prima Juanita y Pino merendando café con leche y galletas, Juanita muy cariñosa, le contó: Tú sabes, mi verdadero nombre es Clorinda Hernández Y Hernández, aquí, en la Villa, en la víspera de San Juan, se cogían tres agujas y se ponían a flotar sobre un platito con agua; con el pensamiento, se marcaban las agujas con el nombre de la rival del pretendiente que uno tuviera y el suyo propio; y entonces donde fuera la aguja señalada del pretendiente esa era la elegida por él.
esquinas se colocaba un ramo de flores, un libro, un rosario y una fuente con agua; entonces se vendaba una los ojos, se le daba vueltas a la mesa y se decía: San Juan Bendito / por ser tu día / píntame aquí la suerte mías /. Palabras que se decían también con lo de las agujas. Se le seguían dando vueltas a la mesa con los ojos vendados y si cogías el ramo de flores era que iba a haber boda; si tomabas el rosario, que ibas a ser monja; si cogías la fuente significaba embarque, y si agarrabas el libro quería decir que una se iba a dedicar a los estudios. Juanita a despedirse de Chucho, le contó: A mí todos los años me hacían el arco de frutas aquí, en casa, y lo poníamos en el comedor; tu madre Fefa, que Dios la tenga en la gloria, me traía la fruta de la finca de Carmenati de tu abuelo Eustaquio, que me la enviaba con mucho cariño tu abuela Pino, que como tú sabes es tía mía.
Cuyos conocimientos por los instrumentos de cuerdas era evidente, nace en La Orotava el 19 de enero de 1913 y fallece en la misma localidad el 24 de julio de 1979, de pequeño se educó en el celebre colegio de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, que entonces ocupaban, primeramente el edificio antiguo del Colegio "Santo Tomás de Aquino" en la calle de La Hoya (hoy Hermano Apolinar), y posteriormente el colegio de San Isidro ocupado en la actualidad por los Padres Salesianos y fundado por el ilustre orotavense Don Nicandro González Borges. Era hijo de otro ilustre orotavense Don Francisco Dorta y Jacinto del Castillo pionero del arbolado que con Don Antonio Lugo, Don Germán Wildpret, Doña Constanza Carnochan, Don Oscar Burchard, y Don Bolinaga sostuvieron el mantenimiento del árbol dentro de la propia naturaleza.
erife", escrito en los años 20. Maestro Francisco Dorta Hernández (Hijo) de que nos corresponde hablar, estudió música y solfeo con los maestros Don Tomás Calamita Manteca y Don Domingo González Delgado (Domingo Febles), en la Academia de Música de La Banda Municipal de La Orotava, era funcionario administrativo del Excmo. Ayuntamiento de La Orotava. Conjuntamente con los señores; Don José Estévez Méndez, Don Eulogio Borges Coello, Don Amadeo Hernández Lorenzo, Don Cesar Hernández Martínez, Don Ambrosio Díaz Áfonso, Don Manuel Hernández Rodríguez, Don Lucio Lorenzo Hernández, Don Antonio Sosa Hernández, Don Benjamín González Pérez, y Don Juan Estévez Álvarez, fundan en Febrero del año 1955 la actual Banda de Música de La Orotava, denominada "Agrupación Musical Orotava".
estacado éxito, sus buenas relaciones con el entonces director de la Banda Municipal el gaditano "Don José Berenguer", le sirvieron para sacarla adelante, pues le ayudaba en los arreglos de obras importantes y su transporte a instrumentos tan limitados como; Laúd, Bandurria, Bandolina y Guitarra, llegando a formar un repertorio de ochenta y ocho obras adaptada a instrumentos de cuerdas. El maestro Dorta en la década de los cincuenta colaboró en la reconstrucción de las rondallas del carnaval capitalino, participando con varios componentes de "Eslava" en la desaparecida rondalla "El Tronco Verde". Don Francisco Dorta Hernández y su hermano Gustavo eran muy conocidos en Santa Cruz de Tenerife, ambos fueron componentes de la legendaria y recordada Rondalla de pulso y púa "Echeyde" allá por los años veinte, además eran grandes futbolistas del Iberia C.F. del barrio del Toscal, fundadores de la UD. Orotava (Copos de Nieve), siendo destacados futbolistas a parte de la música.
e Salesiano; Don Gregorio Santana Arencibia que por entonces se encontraba destinado en el Colegio Salesianos de Santa Cruz de Tenerife. La Orquesta estaba compuesta de dos violines, un contrabajo con arco, una trompeta, una flauta, un saxo tenor y un piano u órgano mecánico. Su finalidad, amenizar misas solemne y veladas líricas en los festivales internos, que celebraba el Colegio orotavense por las fiestas de Nuestra Señora de La Concepción, San Juan Bosco, y María Auxiliadora. Por esta misma fecha, el maestro Dorta colaboró con la Sección Femenina Local para que continuara con el grupo de bailes típico y grupo de cuerdas, que años atrás había revivido con "Eslava", también dio clases de música y cuerdas en el Colegio de "La Milagrosa" de La Orotava, Colegio "Nazaret" de Los Realejos, y en las Organizaciones Juveniles de Santa Ursula y Puerto de La Cruz. El maestro Dorta, era un experto en acordeón, en su casa orotavense de la calle de La Hoya, dio clases a muchísimos alumnos de este melódico instrumento.Cuyos conocimientos por los instrumentos de cuerdas era evidente, nace en La Orotava el 19 de enero de 1913 y fallece en la misma localidad el 24 de julio de 1979, de pequeño se educó en el celebre colegio de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, que entonces ocupaban, primeramente el edificio antiguo del Colegio "Santo Tomás de Aquino" en la calle de La Hoya (hoy Hermano Apolinar), y posteriormente el colegio de San Isidro ocupado en la actualidad por los Padres Salesianos y fundado por el ilustre orotavense Don Nicandro González Borges. Era hijo de otro ilustre orotavense Don Francisco Dorta y Jacinto del Castillo pionero del arbolado que con Don Antonio Lugo, Don Germán Wildpret, Doña Constanza Carnochan, Don Oscar Burchard, y Don Bolinaga sostuvieron el mantenimiento del árbol dentro de la propia naturaleza.erife", escrito en los años 20. Maestro Francisco Dorta Hernández (Hijo) de que nos corresponde hablar, estudió música y solfeo con los maestros Don Tomás Calamita Manteca y Don Domingo González Delgado (Domingo Febles), en la Academia de Música de La Banda Municipal de La Orotava, era funcionario administrativo del Excmo. Ayuntamiento de La Orotava. Conjuntamente con los señores; Don José Estévez Méndez, Don Eulogio Borges Coello, Don Amadeo Hernández Lorenzo, Don Cesar Hernández Martínez, Don Ambrosio Díaz Áfonso, Don Manuel Hernández Rodríguez, Don Lucio Lorenzo Hernández, Don Antonio Sosa Hernández, Don Benjamín González Pérez, y Don Juan Estévez Álvarez, fundan en Febrero del año 1955 la actual Banda de Música de La Orotava, denominada "Agrupación Musical Orotava".estacado éxito, sus buenas relaciones con el entonces director de la Banda Municipal el gaditano "Don José Berenguer", le sirvieron para sacarla adelante, pues le ayudaba en los arreglos de obras importantes y su transporte a instrumentos tan limitados como; Laúd, Bandurria, Bandolina y Guitarra, llegando a formar un repertorio de ochenta y ocho obras adaptada a instrumentos de cuerdas. El maestro Dorta en la década de los cincuenta colaboró en la reconstrucción de las rondallas del carnaval capitalino, participando con varios componentes de "Eslava" en la desaparecida rondalla "El Tronco Verde". Don Francisco Dorta Hernández y su hermano Gustavo eran muy conocidos en Santa Cruz de Tenerife, ambos fueron componentes de la legendaria y recordada Rondalla de pulso y púa "Echeyde" allá por los años veinte, además eran grandes futbolistas del Iberia C.F. del barrio del Toscal, fundadores de la UD. Orotava (Copos de Nieve), siendo destacados futbolistas a parte de la música.e Salesiano; Don Gregorio Santana Arencibia que por entonces se encontraba destinado en el Colegio Salesianos de Santa Cruz de Tenerife. La Orquesta estaba compuesta de dos violines, un contrabajo con arco, una trompeta, una flauta, un saxo tenor y un piano u órgano mecánico. Su finalidad, amenizar misas solemne y veladas líricas en los festivales internos, que celebraba el Colegio orotavense por las fiestas de Nuestra Señora de La Concepción, San Juan Bosco, y María Auxiliadora. Por esta misma fecha, el maestro Dorta colaboró con la Sección Femenina Local para que continuara con el grupo de bailes típico y grupo de cuerdas, que años atrás había revivido con "Eslava", también dio clases de música y cuerdas en el Colegio de "La Milagrosa" de La Orotava, Colegio "Nazaret" de Los Realejos, y en las Organizaciones Juveniles de Santa Ursula y Puerto de La Cruz. El maestro Dorta, era un experto en acordeón, en su casa orotavense de la calle de La Hoya, dio clases a muchísimos alumnos de este melódico instrumento.
En una entrevista publicada en el diario El Día de Agosto del 1983, a un músico de La Villa, Pedro Dorta Martín que nos dejó cuando se celebraba el aniversario de La Banda de La Orotava, con 96 años de edad. En la fotografía de la portada del libro "Un Siglo de La Música en La Orotava", del historiador Manuel Rodríguez Mesa, era el único superviviente de aquel inolvidable conjunto que dirigía el maestro Calamita. Don Pedro enseñaba el libro a todos sus amigos y le preguntaba, "¨a ver si saben quién soy yo?...Todos han muerto, el era el único superviviente, "todos tenemos que irnos algún día". Don Pedro Dorta Martín nació el 27 de marzo de 1.896 en la Villa de La Orotava. Comenzó a interesarse por la música a los cincos años de edad y ya a los catorce era intérprete de cornetín. Formó parte de la Banda de Música de La Orotava cuando la dirigía el compositor y director Don Tomás Calamita y Manteca. A los 19 años entró en la Banda Municipal de Santa Cruz de Tenerife, donde estuvo integrado durante 45 años. Su hermoso pasodoble "Mosaico Melior" ha sido recogido en un disco interpretado por la Banda Municipal de Santa Cruz junto a otras composiciones, entre las cuales se encuentran los conocidos "Cantos Canarios", de Teobaldo Power. Don Pedro, junto con su hermano Francisco, conocido como "Pancho el Gallero", trabajaron para el marqués del Sauzal, Don Bernardo Cólogan, gran figura del deporte isleño. Ambos hermanos fueron cuidadores de gallos de pelea, consiguiendo muchas victorias en este deporte. Don Pedro decía, que la música es vocación de su familia, su hermano mayor, Gabriel, como Pancho tocaban la trompeta, fueron precisamente su hermano Pancho y un músico francés, que se llamaba Valentín, quienes le enseñaron a tocar. Don Tomás Calamita le enseñó solfeo. Estaba satisfecho de haber pertenecido a las Bandas de Música de La Orotava y Santa Cruz, pues valía más un músico de la Banda que uno de orquestinas. El músico de la Banda pone m s corazón en lo que toca. Que los directores lo trataron bien, Don Tomás Calamita, era un gran hombre y un gran pianista, con varios premios en su haber. Don Crescencio Díaz de Felipe era un hombre con mucho genio, pero una gran persona. Recuerda que la primera vez que tocaron su pasodoble "Mosaico Melior" gritó !Bravo, esto sí es un pasodoble!, Don Díeguez Gamallo, era también un músico excelente. Que la Banda Municipal de Santa Cruz, tiene en Viera y Clavijo un buen sitio para ensayar y tiene muy buenos músicos. Los profesores; Aureliano González Pestáno(oboe), Juan González Bolaños(clarinete) y Maximiliano Vera Regalado(FAGOT), los tres les agradecen sus enseñanzas dedicándole una foto suyas. Lo de ponerle al pasodoble el nombre "Mosaico Melior", ocurrió que en una ‚poca necesitaba tres mil pesetas para comprarse una trompeta, y maestro Pedro Dorta conocía al dueño de la fábrica de mosaicos "Melior" al que le haba hecho pequeños trabajos, le dio las tres mil pesetas a cambio de que compusiera un pasodoble dedicado a la fábrica. Cuando compuso el pasodoble, quería que fuese original, que no se confundiera con otros pasodobles. Le envió la partitura a Su Majestad el Rey, recibiendo una carta de agradecimiento que dice lo siguiente: "Su Majestad el Rey me encarga expresarle su agradecimiento por la partitura que tan amablemente le ha enviado" firmada por el marqués de Mondéjar, jefe de la Casa del Rey de entonces. La Agrupación Musical de La Orotava, conjuntamente con el Excmo. Ayuntamiento le ofrecieron un caluroso homenaje al cumplir 95 años de edad, en la Sala de Teobaldo Power de La Orotava en un extraordinario concierto.
La desaparecida revista semanal de La Orotava "Canarias" correspondiente al treinta de abril de 1955, en la página informativa local ágora la celebración del día del párroco y de la parroquia de La Concepción, en un festival que se celebró en el mudéjar coliseo "Teatro Cine Atlante" de La Orotava, reapareciendo en la misma velada la Agrupación Infantil del inmemorial maestro Don Gustavo Dorta Hernández. Don Gustavo era un hombre apasionado por el folklore, la música popular y el deporte. Retirado como futbolista, práctica que ejerció durante tres décadas, considerada prodigiosa en La Orotava por los amantes del balompié. Destacaba por su talento con el balón, que dominaba a la perfección. Cuando colgó sus gloriosas botas, dedicó íntegramente su vigor a la música, y al trabajo con los chaveas de la Villa. Así empezó afanar al principio de los cincuenta con los adolescentes en la Orotava, creando un cuadro infantil artístico que cosechó innumerable éxitos a lo largo y ancho de la geografía insular. Volviendo a la crónica del desaparecido semanario observamos que la infantil rondalla se presenta con un grupo de niños, que forman una coral musical denominado "Coro de monaguillos" integrado por; Pedro Hernández, Alberto Hernández, Ángel García, José García, Vicente Leis, Francisco Javier Sánchez, Segismundo Rodríguez, Felipe González, Ramón Hernández Fariña, y Agustín Llarena. Interviniendo en un simpático repertorio musical en el intermedio del festival, retornando a la finalización del mismo con unos números de Música y Canto. El "Canarias" del siete de Mayo de 1.955: Ante numerosa concurrencia se celebró en el teatro Cine Atlante de esta Villa, un acto de exaltación al Párroco y a la parroquia de La Concepción.
naturales números. El inminente acontecimiento teatral ha producido gran expectación en esta villa, y ya se han recibido proposiciones de las más importantes localidades de Tenerife para llevar a ellas el singular y brillante espectáculo, proposiciones que son materia de detenido estudio. El semanario correspondiente al doce de Noviembre de 1.955 decía: En breve, y con el fin de allegar fondos para obsequiar con juguetes a los niños pobres en la próxima festividad de Reyes, se celebrará en el Teatro Atlante de esta Villa, el reestreno de la caricatura lírica local, en dos semiactos y en prosa: COSAS DEL PUEBLO. Reparto: Ramona, Fefa Díaz; María, Carmen Rosa Trujillo; Cantadora, Carmita Trujillo; Fructífero, Pedrito Hernández; Mister Pique, Paquito Morales; El Alcalde, Agustín Llarena; El General, Francisco Sánchez; El Juez, Juan Felipe Hernández; Robustiano, y Miguel Perdomo, Alberto Hernández; Idelfonso, Vicentito Leis; El Cojo, Paquito Rodríguez; El Inspector, Isabelino Martín; Un Chico, Antonio Polo; Un Campesino, Efrén Sacramento; Un Borracho, José Antonio; Los Acuáticos, Joselito Castro, Inocencio León, y F. Rodríguez; Los Guardias, Miguel Muñoz, Augusto Hernández, Paco Herreros y Tomás Muñoz; Pescadoras y Caladoras, Coro Femenino; Venteros y Estudiantes, Coro Masculino; Hombres y Mujeres del Pueblo, Coro General; Rondalla típica infantil. Decoración de Agustín Ruiz Domínguez. Director de orquesta, maestro Ortí. Los directores han decidido que determinados papeles sean estudiados simultáneamente por distintos niños, con el fin de tener resuelta de antemano cualquier forzosa sustitución, y también para ofrecer a todos las mismas posibilidades de lucimiento personal. La obra se representará sin concha, motivo por el cual los ensayos se efectúan detenida y cuidadosamente. Ya en el "Canarias" correspondiente al 19 de noviembre de 1.955, se anunciaba definitivamente la señalización del debut del cuadro infantil de arte para el 14 del mes de Diciembre del mismo año, miércoles, para el reestreno, en el Teatro Atlante de esta Villa de la caricatura lírica local "Cosas del pueblo", a cargo del Cuadro Infantil de Arte, que dirige el incondicional Don Gustavo Dorta Hernández. La decoración es obra del joven artista Don Agustín Ruiz Domínguez; actuará de maestro concertador y pianista, Don Enrique Ortí y dirigirá la orquesta Don Francisco Dorta Hernández. En el semanario "Canarias" del treinta y uno de diciembre de 1.955, se expresaba, el éxito deslumbrador del ""Cuadro Infantil de Arte, en el que protagonizaron un fin de fiestas los entonces niños; Carmita Trujillo y Pedrito Hernández, que el publico premió con colosal ovaciones. La función constituyó un auténtico y rotundo triunfo, artístico y de público, habiéndose quedado sin poder conseguir localidades varios centenares de personas, tanto de esta villa como de las poblaciones cercanas. Se estrenó una preciosa decoración -vista parcial de La Orotava con el Teide al fondo- del entonces referido joven artista Don Agustín Ruiz Domínguez, unánimemente elogiada, y dirigió la orquesta, con su pericia característica, el maestro Don Enrique Ortí. Verdadero asombro produjo la labor de los entonces pequeños artífices, unos cincuenta, a algunos de los cuales, sin la mínima exageración y pese a su reducida estatura, calificaron de "artistas". La obra se presentó sin apuntador, lo que caracterizó más el mérito de los chiquillos. La crónica decía, que el "gran Pedrito", de ocho años de edad, bordó el extenso papel de Fructífero, el taimado tabernero protagonista de la caricatura, desenvolviéndose sin un solo fallo, y "viviendo" realmente el personaje. La famosa escena de "El Mirlo", con el graciosísimo Albertito Hernández. Levantó una atronadora ovación, que ambos salieron a agradecer después del mutis. El público reclamó la presencia de Paquito, el Cojo Trovador, y la del original Chito León, que con su comicidad insuperable, hizo las delicias del auditorio. Y, por el estilo, todos los demás. Fefa Díaz y Carmen Rosa Trujillo, en los papeles de Ramona y María, respectivamente, y Carmita Trujillo, cantando la Isa. Isabelino Martín, Augusto Hernández, Alcalde, General y Juez, por su orden. Paquito Morales, en el falso Mr. Pique, Antonio Hernández de Inspector; Antonio Polo (Ñete), en el Chico, y Juan Antonio Mora, chistosísimo Guardia. Las Pescadoras muy desenfadadas; Las Caladoras y los Estudiantes, primorosamente vestidos; Los venteros, Los "Acuáticos" y la Rondalla típica infantil, cumplieron muy bien su cometido y lucieron una perfecta caracterización. Para satisfacción de los interesados el "Canarias", publicó algunos nombres, rogando que le dispensen las involuntarias omisiones, porque desconocían los de los restantes intérpretes. Mariana y Fuensanta Hernández, Juanita Coronado, Candelaria Díaz, María Mercedes Pérez, Magdalena Rodríguez, Carmen Lola Galloway, Lala, Mercedes y Celita Domínguez. Chacho Zarate, Paquito Miranda, Agustín Llarena, Tomás y Miguel Muñoz, Joseito Castro, Domingo Domínguez, Ramón H. Fariña, Pepito García, Domingo Hernández, José Manuel Hernández, José García Edodey y Tito Galloway. La prensa local felicitaba calurosamente al director del "Cuadro", Don Gustavo Dorta Hernández; el autor del libro, Don Felipe Casanova Machado; al pintor escenógrafo, Sr. Ruiz Domínguez; al maestro, Don Enrique Ortí, a todos los entonces niños y niñas integrantes de aquél, y a cuantas personas contribuyeron con su cooperación al mayor lucimiento del espectáculo, cuya celebración parecía ilusoria y al fin ha sido realidad. Extraordinaria realidad. En el "Canarias" del siete de Enero de 1.956, un colaborador critico local que firmaba con el seudónimo de "Araútapala", escribía sobre el mencionado "Cuadro". Dando por título -lo que precisan los artistas principiantes y remedios para corregir errores sin recurrir a maestros profesionales-. El mencionado escritor seudónimo, decía en el semanario: En las tres veces que el cuadro de Arte de esta Villa ha actuado en las salas de algunas sociedades, se ha observado un sinfín de cosas que el público, eso creemos, no pasan desapercibidas y en cambio a los organizadores de dichos espectáculos parece que no paran a mirar si está bien o mal lo que hacen estos artistas sobre las tablas. Eluden toda responsabilidad con la consabida frase: "Son principiantes, apenas si han ensayado y por lo tanto no se le puede exigir más". No, no es esa la forma de orientación. Deben darse cuenta que si el publico a lo primero es benevolente, en otras representaciones tiene que exigir más, pues ya la frase anterior estará, como se dice vulgarmente, gastada. El espectáculo siempre debe ir a más y por lo tanto es necesario, desde el principio hasta el fin, corregir y corregir. Dar poco a poco y con el tiempo, más colorido, formar parejas ya sea de baile, cómicas o líricas y no acudir con la misma rutina de siempre. Este Cuadro de Fiesta en el Aire, feliz iniciativa de unos cuantos aficionados, se ha ido apagando y parece que está en tras de desaparecer como tantos otros anteriores. Dios quiera nos equivoquemos. Solamente con co
laboración puede sacarse adelante para poder pasear nuestro arte por todos los pueblos de la isla. Colaboración entre las sociedades, comercios, en fin todo: en general. Las sociedades, cines, y demás con sus salones y los comercios con obsequios y patrocinación de los espectáculos. Esperemos los resultados. Y ahora, si me es dado el hacerlo, daré un consejo unos consejos a los artistas y cantantes. Unas explicaciones sencillas para que sea más aplaudida su actuación. Al salir al escenario no se deben quedar rígidos ante el micro, antes bien, deben saludar con sencillez al público y más si este aplaude. Luego al comenzar la orquesta la introducción, no deben cogerse, no pegarse con nerviosismo al micro, sino ser indiferente a él. Esta es una de las cuestiones que más ha de tener en cuenta. No se debe ser esclavo del micrófono, hay que andar con soltura, cantar, cuando convenga, apartado de él. En las introducciones y en los solos de orquestas, las señoritas, si lo que cantan son piezas modernas, deben dar pases de baile, pero sin exagerar mucho, Mientras cantan deben accionar, también sin excederse, según el ritmo clase o estilo de la canción. En los sostenidos deben darle vibración a la vez y no dejar que se extinga sin gracia. Los caballeros deberán también accionar pero sin tanta teatralidad como las señoritas. En los solos de orquesta o introducciones deberán dar unos pasos no de baile, más bien como si estuvieran abstraídos, como pensando en la canción. Su expresión puede ser triste o alegre según se los pida la canción. Creemos que con esto ya pueden desenvolverse en las tablas. Don Gustavo Dorta Hernández, a pesar de las críticas de los más enterados, mereció, y aun merece los mejores elogios de un pueblo que siempre ha sido homónimo como dice el título del libreto popular "Las Cosas del Pueblo". Don Gustavo y sus colaboradores trabajaron en beneficio de aquella infancia y juventud, aunque le salieran mal las cosas, siempre enseñó el folklore con entusiasmo a muchas gentes de la Villa. "Arautápala", lo mejor que pudo apostar, era su colaboración directa tal como lo expone en la prensa, pues el cuadro estaba compuesto de niños de una edad media de ocho añitos, claro está que lo expresado en el semanario del catorce de Enero de 1.956, es una lección que merecía ensayarla directamente con los protagonistas: Una de las principales características de los tríos vocales es la afinidad de voces. Debe buscarse una compenetración tal, que parezca un solo sonido pero tres modulaciones distintas. Para ello deben buscarse tres voces diferentes, pues si son iguales, al cantar pueden caer en dos faltas: 1º tendrán que esforzarse dos de ellos para hacer voces que no son las suyas, con el siguiente desbarajuste, pues una vez o dos puede salir bien, pero no siempre, porque a una garganta no se le puede forzar; y 2º de que al ser "trío" sería "mono"(sea perdonada esta expresión humorística). De manera que siempre hay que tener en cuenta: las tres voces deben oírse por igual, siempre afines, pero sin caer nunca en una sola voz. Los tríos, más que los vocalistas y cantantes, deben darle mucho sentimiento a la canción, cuando esta no es alegre y si lo es, darle mucha alegría, pero sin caer nunca en la comicidad, animándola con los instrumentos que toquen, pero sin dejar nunca que estos apaguen las voces. Las parejas cómicas pueden formarse, no solo con una señorita y un caballero, sino también entre dos del mismo sexo. Las mismas pueden representar sainetes cómicos, chistes, no solo contados sino también representados. Deben ser cómicos, pero nunca caer en la payasada obscena. El vestuario es casi siempre imprescindible para los dúos mixtos, pero no así siempre para los del mismo sexo, que darían una nota más de elegancia actuando con un frac sencillo, pero no por esto deberán dejar de dar comicidad a sus actuaciones. Nunca se debe dar señales de risa, ante bien, dar naturalidad a lo que representan, como si para ellos fuese real. Nunca se debe caer en la exageración. Todo artista debe tener presentes estos: La imitación trae consigo la degradación en el terreno en que actúa. Cada cual debe crearse su estilo propio, no dejando que este sea pisado por otro. Cualquier duda que se tenga sobre esto, puede ser consultada a este semanario que siempre tendrá buena acogida. Basta solo dirigirla a mi nombre. "Arautápala", deseaba enseñar y contribuir, pero debió de hacerlo inmediato, -no postrimero-, porque los artistas eran niños ilustres de la Villa de la década de los cincuenta, y los organizadores deseaban acontecer al pueblo espectáculos culturales, pues en aquella época, la televisión, y los vídeos eran los grandes desertores.
